El gobierno de Maduro remarcó que los funcionarios sancionados “se han dedicado a salvaguardar la paz, la estabilidad, la recuperación económica y la unidad nacional ante la violencia fascista diseñada, financiada y promovida desde Washington, contra la voluntad democrática del pueblo venezolano”. Además advirtió que “el pueblo de Bolívar y Chávez jamás podrá ser doblegado y que su camino triunfante hacia la consolidación de la paz y la estabilidad política, económica y social es irreversible”.