El bloque K del Senado buscará aprobar solo 53 de los 116 DNU del Presidente

Algunos sensibles, como los de ampliación del Presupuesto, por ahora no serán aprobados

¿Mensaje para Alberto Fernández? El bloque K del Senado buscará aprobar solo 53 de los 116 DNU del Presidente

 

Tras depurar el listado de 116 DNU firmados por Alberto Fernández en sus casi dos años de gestión, finalmente el bloque del Frente de Todos del Senado resolvió que este jueves sólo se buscarán aprobar en el recinto 53 de ese conjunto de decretos, es decir menos de la mitad de los que están pendientes.

Muchos de los que quedarán sin aprobarse son muy sensibles, como las ampliaciones presupuestarias y reasignaciones de partidas, según dijeron las fuentes consultadas.

Justo este jueves es el último día antes del recambio legislativo del 10 de diciembre. A partir de ahí, la bancada oficialista alineada con Cristina Kirchner perderá el cómodo quórum con el que se manejó en los últimos dos años.

Así, esta era la oportunidad ideal para aprobar en el recinto la totalidad de los DNU presidenciales que aún tienen pendiente el aval parlamentario.

Más aún: a mediados del mes pasado la comisión bicameral de Trámite Legislativo había dado dictamen favorable a los 116 DNU y los había dejado en condiciones de ser aprobados en el recinto.

Se suponía que ahora sería el turno de que el Senado los “blindase” (en Diputados no tiene el número ni ahora ni después del 10 de diciembre).

Pero algo pasó y en el medio de los tironeos entre Alberto Fernández y Cristina Kirchner en el Senado definieron que solo le aprobarán 53 DNU al Presidente. Así se lo trasmitieron a la bancada de Juntos por el Cambio, que ahora definirá una posición.

Sospechas

El argumento que repiten en el Frente de Todos es que no se quiere llevar al recinto los decretos más polémicos para no tensar más la relación con la oposición justo en la previa del tratamiento en el Congreso del Presupuesto 2022 y el futuro acuerdo con el Fondo Monetario Internacional.

Pero con malicia algunos sospechan que en realidad Cristina Kirchner se estaría guardando una carta bajo la manga para el caso de que escale su interna con Alberto Fernández.

La lectura que hacen en el Congreso es que eventualmente la vicepresidenta podría llevar al recinto alguno de los DNU sin aprobación del Senado e intentar voltearlos. Para que se caigan, eso sí, después necesitará que también Diputados vote por su rechazo. Mientras eso no suceda, seguirían vigentes.

No existen antecedentes de un solo decreto anulado por el Congreso. De ocurrir, sería un fuerte golpe político para quien sea el presidente de turno.

En la bancada oficialista se asegura que no hay “ninguna” intención de dañar al Presidente. Pero reconocen que retendrían para sí mismos ese eventual poder de daño.

Según lo que le comunicó el oficialismo a la oposición, el plan es aprobar en el recinto 23 DNU vinculados con la pandemia, más que nada en los que se fijó -y luego fue prorrogando- el Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) y de “Distanciamiento Social, Preventivo y Obligatorio” (DISPO).

Además se buscará aprobar 30 DNU relacionados con la “producción y el trabajo”, como los de aumentos salariales y haberes jubilatorios, los de prohibición de despidos y de doble indemnización, entre otros.

Los que quedarán sin aprobar son las reasignaciones de partidas presupuestarias, la ampliación del Presupuesto en más de $ 700.000 millones en el marco de la campaña electoral, la reprogramación de pagos de deuda con el Club de París, entre otros decretos sensibles.

Según le trasmitieron a la oposición desde el oficialismo, la intención es ir “viendo tranquilos” los 63 decretos restantes, es decir los que no serán aprobados en la sesión de este jueves.

Para este jueves, por otro lado, se espera que sean tratadas una serie de iniciativas presentadas por senadores a los que se les termina al día siguiente el mandato. Se trata de un clásico legislativo, pero que sirve para asegurar el quórum.

Mientras, siguen las versiones de una “inminente” división de la bancada del Frente de Todos con la aparición de un sub bloque integrado por senadores que cargan una serie de malestares, sobre todo con la Casa Rosada.

Este martes hay prevista una nueva reunión entre el sector disidente. El Gobierno -y Cristina- buscan frenar la eventual fisura.

Left Menu Icon